5.7.1.5.- Porosidad
La porosidad de un material es el porcentaje del volumen de espacios libres que se forman entre las partícula o dentro de las mismas. Estos espacios se clasifican en porosidad externa e interna, respectivamente. Los espacios porosos que se forman entre las partículas originan la porosidad externa, ésta es genera por la forma de empaquetamiento y grado de compactación a la que se someten los materiales, además está influenciada por el tamaño del contenedor, la forma, tamaño, naturaleza y características de las partículas constituyentes de la fracción sólida.
La porosidad interna depende de la naturaleza de las partículas, puede estar constituida por poros cerrados dentro de partículas huecas o por poros abiertos en el interior de las partículas que comuniquen con los poros externos. A los poros internos que están abiertos también se les conoce como poros percolantes y los poros cerrados o no percolantes están dentro de las partículas sin conexión con los poros exteriores.
Los poros de importancia para la retención y movimiento del agua dentro del sustrato son los poros abiertos y los percolantes. En algunos materiales se presenta un tercer tipo de porosidad, es la que se forma por fracturas de las partículas. La porosidad efectiva esta integrada por todos los poros interconectados (Burés, 1997).
La porosidad se expresa como el cociente entre el volumen de espacios libres y el volumen total del sustrato dentro de un contenedor. Así una porosidad del 40 % significa que de un litro de sustrato, 400 mililitros están ocupados por poros y los 600 restantes son ocupados por la parte sólida del material formador del volumen. La porosidad de los sustratos varía de un 30 % en los suelos compactados, hasta cifras del orden del 95 % o más en algunas turbas.
En recipientes y macetas se recomiendan usar sustratos con porosidad entre del 50 % a 85%. En general, un buen sustrato deberá tener una porosidad total de por lo menos 70 % con respecto a su volumen (Ansorena, 1994; Cabrera, 1999).
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Tamaño fracción (mm) |
Tipo de porosidad en % del volumen |
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Total |
Efectiva |
Cerrada |
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0.25 – 0.50 |
93.44 |
85.57 |
7.87 |
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0.50 – 1.00 |
95.15 |
86.29 |
8.86 |
Fuente: Burés, 1997
Tabla 5.2. Porosidad total, efectiva y cerrada de dos fracciones granulométricas de perlita expandida.
Un sustrato apropiado es aquel que contiene poros pequeños y grandes. Los macro poros son los que permiten la circulación del aire y los micro poros retienen el agua que la planta necesita. Los poros pequeños son menores de 30 micras y los grandes son mayores de 30 micras. El agua se mueve por capilaridad dentro de los poros pequeños. Buenas características de aireación y movimiento del agua dentro de un sustrato se logran mejor en mezclas de materiales que contengan partículas de diversos tamaños. (Cadahia, 1998; Ansorena, 1994; Abad, et al, 2004).
La porosidad disminuye cuando aumenta la densidad aparente de un material. Al comprimirse un sustrato se observa un aumento de la densidad aparente y una disminución de la porosidad, situación que se traduce en mayor peso de los contenedores llenos.
